LA LOCURA DE LA PREDICACIÓN...

1 Corintios 1:21

Pues ya que en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predicación.

He aquí la LOCURA DE LA PREDICACIÓN:

Oh Santa Locura, La cual es lo máximo entre nosotros, pero para Dios no es mas que lo que nos permite entender de él de su mente inconmesurable...

El dilema interior del Hombre que Busca Hacer la Voluntad de Dios: <<Reconocer la voz de Dios>>

Reconocer la Voz de Dios, para ser direccionado en sus decisiones cotidianas, ¡vaya dilema!

¿Donde esta Dios? Dentro de mi, Junto a mi, o Sobre mi...

Este Dilema lo aclararemos en el desierto del alma, del cuerpo y del Espíritu.

Lucas 4:1-13

4:1 Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán, y fue llevado por el Espíritu al desierto
4:2 por cuarenta días, y era tentado por el diablo. Y no comió nada en aquellos días, pasados los cuales, tuvo hambre.

He aquí el desierto del Cuerpo: El Hambre, por lo que se mueven las naciones, los reinos y los pueblos.

Acaso no era aquí su mismo cuerpo el que le pidió alimento, si fue su Yo interior el que lo empujo a obtener el pan a través del Poder delegado de Dios, pero su cuerpo fue sujetado con cabestro como se sujeta a la bestia para que obedezca y así su cuerpo alcance una mayor dignidad.

Pero hoy vemos a muchos religiosos que a traves de esta autoridad delegada por Dios, no hacen otra cosa que rendirle culto a su cuerpo obteniendo riquezas y lujos desmedidos a traves del Poder que Dios algun día les delego...para que terminen siendo aquellos de los que se dice: 

Mateo 7:22-23

Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.

4:3 Entonces el diablo le dijo: Si eres Hijo de Dios, dí a esta piedra que se convierta en pan. 

4:4 Jesús, respondiéndole, dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios. 

4:5 Y le llevó el diablo a un alto monte, y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra.
4:6 Y le dijo el diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha sido entregada, y a quien quiero la doy.
4:7 Si tú postrado me adorares, todos serán tuyos.

 He aquí el desierto del Alma: Aquí el anhelo de Obtener una posición, una necesidad superior en el Triangulo de Maslow, pero ¿quien le hablo? Acaso no fue su Yo personal queriendo lo que quieren todos los hombres controlar a sus semejantes, a ese Yo idolatrico del Ego interior, muchos le llamamos diablo por ser pisoteador de la dignidad de nuestros semejantes.
4:8 Respondiendo Jesús, le dijo: Vete de mí, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás.

(en otras palabras Amar a tal grado a sus semejantes como se adora a Dios, y servirles como lo harías con el mismísimo Dios). Esto lo que Jesús se respondió a sí mismo.

4:9 Y le llevó a Jerusalén, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate de aquí abajo;

He aquí el desierto del espíritu Humano: El deseo de Ser en el que todos esperan: El Mesías, El Avatar, el Salvador, El Re-Ungido, el Superman del paseo...

 
4:10 porque escrito está: 
A sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden;
4:11   y,   En las manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra.
4:12 Respondiendo Jesús, le dijo: Dicho está: No tentarás al Señor tu Dios.
4:13 Y cuando el diablo hubo acabado toda tentación, se apartó de él por un tiempo.